La caricia de las sábanas
pierde su nombre todos los veranos.
Te veo sobre ellas, me miras
como si nunca más fueras a hacerlo,
preguntas si he dormido bien.
Como no hacerlo estando abrazado a ti.
Entonces miras el reloj,
-fijamente, eternamente-
y estás convencida
que sigo allí, en aquél estío tan nuestro.
Estoy seguro
que te quedaste para siempre
reflejada
como una imagen en el espejo.
Tú misma, yo, y el recuerdo.
Pero en mi corazón,
te sigo viendo.
Carlos Gargallo (c)
8 comentarios:
El soñador que escribe es un ser incorregible, sus pies están en la tierra, pero su corazón está en las estrellas.
Mantenerse por media hora en ellas es un milagro que atrapa diariamente a quien lo prueba.
Gracias por seguir compartiendo.
Cálido abrazo.
Me gusta la añoranza reflejada, conozco el sentirla de vez en cuándo.
Agur un saludo.
EXCELENTE POEMA CON UNA NARRATIVA ENVUELTA DE SENTIMIENTOS NOSTÁLGICOS Y RECUERDOS QUE PERDURAN.
UN CORDIAL SALUDO.
Y la marca en la sábana dibujando su forma añorada.
Caricia del recuerdo, caricia del tiempo.
Un abrazo.
Alicia
Muy bello. Quedarse siempre en quien amas. Un abrazo
Hermoso.
Un abrazo.
Qué hermoso ese reflejo de unos sentimientos vividos y acaso soñados siempre, vertido en el imborrable recuerdo.
Saludos
Sescubriendo la belleza y sensibilidad que dejas en tus varsos Carlos, un lujo leerte poetaç
Un abrazo
SWtella
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