La luz de febrero
da un último salto
antes de abandonar los acantilados.
A tras pies, una lluvia fina
comienza a resbalar
sobre las lindes de este mundo.
Nadie puede ahora gritar,
ni elevar un poco la voz siquiera,
estamos en el tiempo exacto de la paz
que descansa en la orilla misma
del mar y sus abrazos.
Silencio.
Silencio que penetra
en el límite yacente
de nuestro único cuerpo
llegando a los brazos de azul
de los últimos dioses.
En lo profundo,
ríe el alma de los náufragos.
Carlos Gargallo (c)
14 comentarios:
Preciosos versos Carlos, me ha gustado pasar por aquí. Un abrazo, Inés
Nadie puede ahora gritar,
ni elevar un poco la voz siquiera,
estamos en el tiempo exacto de la paz
que descansa en la orilla misma
del mar y sus abrazos.
Una poesía de bellas metáforas y pensamientos íntimos que nos hablan de nosotros en el momento decisivo de nuestra vida. Ojalá fuese al amanecer como tú expresas y pudiéramos refugiarnos en las olas amorosas de nuestros dioses, los nuestros,alcanzando esa paz deseada en el profundo silencio de nuestro mar. Un abrazo, poeta.
La sonrisa de los náufragos amanece en el poema, Carlos, y descansa en sus brazos...
Un beso
Marian
Como siempre, un placer leerte.
Hasta pronto.
Exquisitez de expresión en esta tu poesía.
Grato paseo por aqui.
con cariño, esencia.
Preciosa entrada, creo que te gustará algunas entradas de maneras de amor.
Una entre ellas.
http://manerasdeamor.blogspot.com/2010/02/entre-fantasmas.html
Tengo que pasear más a tu lado...
Un gusto inmenso leer tu poesía.
Beso
Dejemos pues que el alma de los náufragos ría tras el salto de este febrero que agoniza ya.
Hermosas imágenes me has regalado.
Bicos.
Leerte es llenarse de imágenes y flotar en ellas junto a tus versos.
Mi admiración a tu poesía.
Saludos
Cecy
...y ríe el eterno cielo, mientras uno, solo, ingrávido, mira al naufrago y...también rie.
Bonito.
Somos el tiempo
Gracis hermosos por vuestros comentarios, os quiero
Ha sido un verdadero placer esta visita...de hecho, no sabìa en cual poema dejarte un mensaje...
Mis cordiales saludos
Es la primera vez que leo algo tuy y me ha encantado. No será la última.
Los versos en cada estrofa están bien engarzados. Destacar algo es injusto pero me quedo con el comienzo:
"La luz de febrero
da un último salto"
y los dos del final:
"En lo profundo,
ríe el alma de los náufragos."
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