De qué sirven las canciones,
los cantos de pájaros,
las buenas intenciones,
el bello amanecer, la aurora,
el camino recto,
los abrazos y los besos,
las palabras que del corazón salen,
los suspiros y caricias
bajo las sábanas arrugadas,
los ojos de amor
como brasas,
conservar intactos los paisajes
donde nos quitamos la ropa,
o el mar que soñamos nuestro,
y que habites en mi memoria
donde cada día se hace vida
y desaparecen las sombras...
De qué valen
si esta corta distancia que nos separa
se me hace eternamente inmensa.
Carlos Gargallo (c)
7 comentarios:
Hacía tiempo que no leía nada tuyo así que este poema lo he leído con gran interés y de verdad que me ha gustado mucho.Saludos
Sin dudas, la distancia es la frustración de todos esos anhelos.
Muy buen formulario.
Un abrazo
Hola; hace mucho que no me meto en tu blog. Veo que el poema se va tensando hasta llegar a la gran antítesis, "corta distancia".
Me gusta también que esta tensión permita recordar todo aquello que hace mantener la relación del "yo" y el "tú".
Saludos.
Pablo.
hay momentos en que la distancia irreal es la mas dolorasa
Hermoso poema
Besos
PRECIOSO POEMA, CARLOS.
EN MUCHAS OCASIONES ES LA DISTANCIA LA QUE ACERCA, LA NECESARIA TOMA DE CONCIENCIA DEL VALOR DE COSAS, PERSONAS, VIDA..
Muy bonito este poema.
Saludos
Hola Carlos, alimentamos el alma de recuerdos, luego los recuerdos se hacen anhelos y terminan en el mayor pesar de nuestra existencia.
Me gusta el viaje de tus versos y la verdad que cargas al final.
Como siempre un placer leerte.
Un abrazo
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