Tú te conoces, dices,
no quieres
que nadie sepa de tus asuntos,
pero hay cosas que se tienen que saber,
milagros producidos dentro de ti,
suspiros de los que vas dejando por los rincones
y luego, veloz, recoges, archivas muy bien
para seguidamente
esconder bajo la cama.
Tú dices que conoces el como y el porqué
de tanta insistencia en cubrirte el corazón,
pero el corazón, está para vivir intensamente,
no para desterrarlo junto con no sé cuantos más asuntos.
Un oscuro secreto, nunca puede ser tan lóbrego
como para dejar de respirar de repente.
Hoy, voy a desvelar lo indesvelable,
tu enfermedad tiene nombre,
uno que se conoce desde siempre.
Amor, amor y nada más que eso.
Carlos Gargallo (c)
3 comentarios:
Dicen que no se puede ocultar el estar enamorado. Que se nota. Por eso de secreto nada. ja, ja. Bonito poema. Saludos milagros
Cierto: el amor es una enfermedad. Pero si es correspondido, nos da la vida. Saludos cordiales.
Buen poema y a la vez una reflexión de nuestra actitud con el amor.
Un abrazo
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