Me hablas
y un mar de suspiros
recorren mi boca.
Me dices te quiero,
y salta el corazón
aquí dentro
mientras
se me llena la mirada
de tu luz de arco iris
y desaparecen las sombras.
Me hablas,
y como un canto de ruiseñores
me voy acostumbrado de nuevo,
a vivir la vida.
Tus palabras son como bálsamo
que van curando heridas
y me emociono al escucharte,
salto de alegría,
convoco todo lo que es tuyo
hasta soñarte cada día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario